domingo, 8 de noviembre de 2015

La vida de Adele o sobre el descubrimiento de la sexualidad


Ayer tuve la oportunidad de ver "La vida de Adele" (2013), una película francesa del director Abdellatif Kechiche. La película es una adaptación de la novela gráfica "Blue" de Julie Maroh. Recibió la Palma de Oro para el director y las actrices principales en el Festival de Cannes de 2014 y a partir de ahí, Premio César a la actriz revelación, nominaciones en los Globos de Oro, en los premios BAFTA, mejor película en el Círculo de Críticos de Nueva York y una larga lista de premios y nominaciones.

La película
Adele es una chica de 17 años que acude al instituto y está en pleno período de efervescencia sexual. Entre sus iguales, el sexo heterosexual empieza a estar muy presente y empieza a sentir las presiones del medio. Concretamente, tiene una "amiga" que la incita a salir con un chico moreno muy guapo, de unos cursos por encima de ella, y Adele se presta a ello. Quiere descubrir. El rubor en sus mejillas se asoma de manera permanente por su rostro de Lolita. Paralelamente, en literatura, abordan una novela que contiene precisamente una escena que habla del proceso de enamoramiento y de lo entendido como flechazo en toda regla. Ese momento, en que uno un día se cruza con la mirada de otro y ese otro ya invade la mente de uno; y eso le pasa a Adele, que un día se cruza con Emma, una joven universitaria estudiante de Bellas Artes, que lleva el pelo azul y que parece libre y feliz. La atracción es potente como las escenas de sexo explícito que aparecen. Todo presentado de una manera elegante, deliciosa, y cargado de gran intensidad. Planos maravillosos, luz espectacular, banda sonora exquisita y actrices sublimes.