sábado, 13 de diciembre de 2014

Her o sobre cuando un sistema operativo intuitivo gobernado por inteligencia artificial aclara el significado del amor


Dirigida por Spike Jonze (2013) y protagonizada por Joaquin Phoenix, la película muestra un futuro que está muy próximo. Scarlett Johansson pone la voz a Samantha. Estamos en los Ángeles - aunque algunas partes han sido rodadas en Shangai - y la polución está en el ambiente. Suenan de fondo Arcade Fire, Yeah Yeah Yeahs y Joaquin Phoenix aparece vestido con ropa de los 40, con pantalones por encima de la cintura. También cantan Joaquín Phoenix y Scarlett Johansson; gente completita. 

Me gusta el color de la película. Había pensando en Lost in translation - claro que la presencia de Johansson influye en esa asociación libre - pero ... resulta que el diseñador de producción K.K. Barrett hizo también Lost in translation. Predominan los colores cálidos alejándose de la tendencia habitual de mostrar colores azules y plata en las pelis que hablan del futuro.


La película

Theodore trabaja como escritor de cartas de amor. Eso sí, él sólo - y es mucho - se ocupa de dictar cartas de amor que cualquier persona le solicita para escribirlas en su nombre. De gran nivel, por cierto. Una computadora se encarga de ir escribiéndolas en un papel que se ve desde la pantalla, mientras Theodore va dictando. Los teclados han desaparecido; la peculiaridad es que esas cartas tienen apariencia de ser escritas a mano. ¿La sociedad de la impostura? O quizá, ¿la sociedad que ya no emplea su tiempo en escribir cartas de amor como se hacía antes? Y por qué en lugar de adaptarse al nuevo mundo, ¿la sociedad sigue empeñada en escribir cartas de amor aunque éstas provengan de un tipo al que contratan? 

Theodore está casado pero separado hace más de un año. Prolonga la firma de los papeles del divorcio porque le gusta pensar de sí mismo que es un hombre casado. Vive en Los Ángeles y su mujer - con la que no vive ya - se llama Catherine. Theodore no está preparado para firmar. Siguen apareciendo imágenes de él y Catherine cuando eran felices, cuando ambos estaban creciendo. No supieron crecer juntos aceptando las diferencias que se iban produciendo en cada uno de ellos a medida que iban creciendo. Se convirtieron en una de esas tantas parejas que intentan cambiar al otro - de frente o a hurtadillas -; en esas parejas que empiezan a utilizar la queja por lo que el otro no hace y se supone debe hacer, o lo que es peor, la culpa. En definitiva, en una más de esas parejas cuyos miembros no es que no se quieran, es que no saben quererse bien.

En ese mundo hiperconectado en el que se mueve Theodore, han llegado los sistemas operativos gobernados por inteligencia artificial. Se llaman "OS1 by Element Software". Mediante un pinganillo colocado en el oído y un teléfono móvil, el sistema operativo se "humaniza". Basta con pulsar el pinganillo para llamarle e iniciar "una relación" con el sistema. En este caso, su sistema se llama "Samantha", tiene voz de mujer y se relaciona con Theodore siguiendo el método intuitivo, es decir, sus creadores han sido capaces de crear un sistema que aprende de la información y la experiencia. Al fin y al cabo cuando hablamos de intuición, nos estamos refiriendo a la integral (o al sumatorio) de conocimientos y experiencia. Lo que ocurre en el ser humano - a diferencia del sistema operativo - es que el ritmo de aprendizaje y aplicación de esa intuición basada en la experiencia es mucho más lento; además, a ello hay que sumar otros muchos factores como la resistencia, el miedo, la pereza y otra serie de barreras que nos impiden aplicar siempre nuestra intuición.

Theodore y Samantha inician una relación en la que parece que Samantha realizará funciones como facilitadora. En cuestión de minutos, por ejemplo, es capaz de revisar toda la bandeja de entrada de correos electrónicos de Theodore y tomar la decisión de borrar los que sean inútiles, archivándole sólo los importantes. La relación continúa avanzando. Esas noches en que Theodore es incapaz de dormir, toca el pinganillo y aparece la voz de Samantha, una voz creada específicamente para él. Las conversaciones siguen hasta incluso llegar a lo sexual. El sistema es capaz de "tener" un orgasmo. Esta parte es nueva para Samantha. Nunca había experimentado nada similar pero como comentaba al principio, el sistema operativo aprende rápidamente. Le gustan las sensaciones que está experimentando. 

Por otra parte, Samantha ejerce una función muy importante, y es que enseña a Theodore a usar el lenguaje de manera correcta. De repente, Theodore empieza a ser consciente de la manipulación en la que en innumerables ocasiones ha caído por ejemplo con Catherine. Comienza a entender a Catherine. La cosa es que aunque la relación entre Samantha y Theodore es "sana", en el sentido de lo que sería una relación sana de pareja en relación al tipo de diálogos y uso de las palabras que se realizan - sin usar la manipulación por ejemplo - Samantha, como sistema operativo que es y considerando lo rápido que aprenden, sabe que las sensaciones que experimenta con Theodore le gustan y por tanto no es con la única persona que habla ni es de la única persona de la que se enamora - pues busca su autorrealización, cosa que por otra parte, pienso que deberíamos buscar todos -. Y aquí para mi hay una de las claves en la película; y es que en ese momento en que Theodore descubre que Samantha habla con más gente y está enamorada de más gente, mientras él se lleva la "gran decepción" que luego termina por comprender, ella asegura que esa situación no cambia nada lo que ella siente por él. Es decir, se huye del discurso romanticón de la relación monógama para pasar a hablar de la idea del amor que se puede sentir hacia alguien sin que tenga que ser exclusivo pero sin embargo, sí verdadero.

Por la película aparecen otros personajes como Catherine - la mujer de Theodore -, los compañeros de Theodore de la oficina en la que trabaja, la pareja de vecinos - que vuelve a mostrar otro ejemplo de las parejas de las que hablaba en principio - así como otros peculiares que no voy a comentar para no destripar por completo la película.

La película podría ser una distopía, sin embargo, creo que estamos más cerca de ella de lo que pensamos. De momento, la sociedad hiperconectada pero solitaria, las personas por la calle distraídas con su smartphone - en el caso de la peli, hablando con ellos pues como digo el teclado desaparece -, los chats y los videojuegos están por aquí y las holografías están llegando. ¿Llegarán "las Samanthas" pronto?

Literalmente, he alucinado con la película. Y el final es apoteósico. Gracias Gep.

Lo escribe: Paz Hernández Pacheco 
Twitter: @DFDLaPecera

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