jueves, 26 de mayo de 2022

Sobre temas recurrentes (1): El tuteo

En noviembre de 2012, inauguré este blog. A propósito de la película "El erizo" de Mona Achache. En concreto, a partir de una frase que verbaliza Paloma, la niña protagonista superdotada:

"Perseguir las estrellas, para no acabar como un pez en una pecera". 

Así, este blog surgió, en primer lugar para precisamente no olvidarme de eso. Hace 10 años, cuando recién entraba en la treintena, quería cuidarme mucho de no acabar en una pecera. De la casa al trabajo, del trabajo a casa. Pretendía "salirme un rato de la pecera". Qué es eso para mi. Darle espacio a mis gustos. Literatura, música, cine y otros placeres sencillos, como cocinar. Es el subtítulo de este blog. Sin embargo, una rápida mirada al "archivo de blog" deja entrever que, como una gran parte de los adultos, al final parece que estoy acabando en una pecera. Cada año publicando menos en este blog. Es gracioso. No obstante, me quiero resistir. Quiero hacer uso de mi voluntad y no abandonar lo que me gusta y especialmente, no convertirme en una señora dejada de la mano de Dios.

El blog también nació para practicar la escritura. En esa época me había quedado en situación de desempleo y estaba barruntando para 2013 poner en marcha mi empresa. Ese año 2012 fue un año de esos que llaman "reciclaje profesional". Había estado 7 años trabajando por cuenta ajena y me había quedado en situación de desempleo. Adquirir la disciplina de la escritura a través de este blog, para luego aplicarla a un futuro blog profesional. Siempre elucubrando. 

Lo de hacerse medio adulta también tiene otras ventajas. Si en aquella época me importaba lo que pensaran de mi - y ya me vale porque tenía 30 años -, en la actualidad, con 40, me importa algo menos. Debería decir que no me importa nada pero no he llegado a ese punto todavía. Imagino que llegará. El caso es que las 117 entradas publicadas en este blog hasta el momento, han versado sobre literatura, música y cine. Algún atrevimiento en la publicación de relatos propios impulsivos - sin repasar - y una incursión en una serie de "Observaciones" que recogí en el verano de 2019. Un verano en que murió una tía materna. Una muerte que fue otro punto de inflexión en la familia. Un verano intenso en emociones. 

En los últimos tiempos, aún sabiendo que estoy incumpliendo las recomendaciones que me parecen certeras de Andrés Pérez Ortega, que te avisa sobre que mejor centres los esfuerzos en tu blog y evites el instante de las redes sociales, he estado más tiempo en twitter; me doy cuenta que periódicamente caigo en temas recurrentes. Aquí quería llegar. He utilizado el paréntesis y el 1 en el título porque, tal vez, inicie una serie de temas recurrentes sobre los que suelo repetirme periódicamente en mis redes. No voy a presionarme con la serie. A lo mejor esto es sólo una entrada de temas recurrentes y se acabó y sigo con mis placeres sencillos. O no. 

El caso es que me apetece compartir y poder explayarme algo más en algunos temas que me importan. No tengo expectativas. Si se genera conversación sobre el tema será bienvenida. Si no, pues en este espacio infinito que es internet quedarán algunas reflexiones propias. No tengo intención de nada. Lo voy a hacer por el amor al arte y porque me divierte. 

Y como pienso que el tuteo es una de las causas que están generando la fealdad en la España del año 2022, quiero inaugurar esta sección hablando de tuteo. 

A propósito de Felipe VI - porque no me acuerdo bien si el Emérito lo hacía pero revisaré en mi amiga youtube - en los últimos años, en su discurso de Navidad, el hecho de que se dirija a los españoles tuteándonos me genera cierto malestar. ¿Por tiquismiquis? Puede ser pero también tengo mis motivos. ¿Puede ser ese tuteo una de las causas por las que parezca que se trata hoy a la monarquía como "el pito de un sereno"? Y me disculpáis la expresión. 

Lo que sí tengo comprobado, porque en mi vida hago experimentos, es que desde que en determinados ámbitos laborales me relaciono con el tercero hablándole de usted, otro gallo me canta. Comprobé a base de práctica que el valor de "la cercanía" no es adecuado para practicarlo con cualquiera; y menos pienso que debería hacerlo Felipe con nosotros. Más que nada considerando el buitreo que hay. No todo el mundo se merece la cercanía. Me acuerdo de Umbral cuando en una entrevista que le hizo Lola Flores le decía a Lola: "No todo el mundo se merece la verdad". Pues lo extrapolo a la cercanía. 

Y aprovecho la ocasión, para comunicarte, querido lector si es que estás ahí, que a partir de ahora, me dirigiré a ti con un usted que mantenga esa línea divisoria de respeto que nunca deberíamos haber perdido. 

Lo escribe: PAZ HERNÁNDEZ PACHECO


viernes, 11 de febrero de 2022

La estancia vacía o sobre cuando Michi Panero decidió terminar en el útero materno

Una de las primeras entradas de este blog fue la relativa a la película documental "El Desencanto" de Jaime Chávarri, que fue rodada en el año 1976. Al cabo de veinte años, se rodó "Después de tantos años" de Ricardo Franco. Creo que quedé más tocada con esta segunda. Excesivamente demoledora.

Esta tarde he estado viendo "La estancia vacía" de Miguel Barrero e Iván Fernández, rodada en 2007. Twitter, en ocasiones, te ofrece sorpresas agradables y el otro día, un tuitero respondió a un pequeño hilo de frases míticas de los hermanos Panero, haciendo alusión a esta película que era ajena a mi; el maravilloso e infinito mundo de Internet - idea en la que coincido con Escohotado - me ofreció la posibilidad de verla. Resulta que está en youtube. Puede verse aquí

La película

En el año 2002, Michi Panero, que por entonces vivía en Madrid y padecía diabetes y cáncer, decidió volver a Astorga. Básicamente, a morir allí. Hecho que ocurrió en 2004. 

La película realiza una revisión de la figura de Michi Panero en boca de personas que le conocieron toda la vida y de los que estuvieron en su última etapa en Astorga. Destaco el testimonio de Angelines Baltasar. Ejerció el papel de lo que en aquella época se conocía como "tata". Estuvo presente cuando Leopoldo y Felicidad eran jóvenes y cuando los 3 hijos eran pequeños. Con ellos hasta dos años después de morir Leopoldo padre. Luego se casó y dejó a la familia. No obstante, en las idas y venidas de la familia desde Torrelodones a Astorga, Felicidad solía llamar a Angelines para que arreglara la casa para cuando ellos fueran. 

En el momento del Desencanto, aunque Jaime Chávarri quiso que Angelines apareciera en la película, ella se negó. Le pareció una deslealtad que hicieran esa película y arremetieran indiscriminadamente contra el padre. Dice ella que Leopoldo y Felicidad eran de las mejores personas que había conocido; que Leopoldo no era malo como lo pintaron. Y es que, al final, parece que tenemos que hacer caso a nuestros mayores. Resulta que Michi Panero confesó años después estar muy arrepentido de haber rodado el Desencanto. Y podemos hacernos una idea más aproximada sobre el por qué, a través del testimonio de su amiga Mercedes Unzeta. Una poeta que conoció bien a Michi. Su testimonio también me ha resultado ser muy esclarecedor. Michi convertido en un personaje atrapado en su apellido. Michi rodando un reality show que se le fue de las manos. 

¿Por qué volvió a Astorga? Huyendo de la soledad madrileña y de la precariedad. Sin embargo, en Astorga, también experimentaría esa soledad. Aunque allí está Angelines, con quien se reencuentra. A ella le pide que le ayude a buscar un alojamiento. A ella es a quien puede llamar a cualquier hora del día si necesita algo. Básicamente, Angelines terminó siendo su cuidadora. Michi buscando en ella una sustituta de su madre muerta. 

martes, 8 de febrero de 2022

El dolor de los demás de Miguel Ángel Hernández o sobre cuando la comprensión se obtiene en diferido

 


Acabo de terminar esta novela de Miguel Ángel Hernández. Lo primero que leo de este autor. Profesor de Historia del Arte en la Universidad de Murcia. Tiene publicados diferentes ensayos y libros de cuentos. En Anagrama, ha publicado "Intento de escapada" y "El instante de peligro". 

La novela

La memoria es, dolorosamente, la única relación que podemos sostener con los muertos. En la antesala de esta novela, aparece esta frase de Susan Sontag que es el anticipo de lo que viene después. 

No revelo nada si comparto la idea básica en torno a la que gira la novela. Nicolás, un amigo íntimo de Miguel Ángel - el autor -, ha matado a Rosi, su hermana, y luego, se ha tirado por un barranco. 

Aunque comienza así: 
Han entrado en la casa de la Rosario, dice tu padre desde la habitación de al lado, han matado a la Rosi y se han llevado al Nicolás. Es lo primero que oyes. La voz que te despierta. La frase que ya nunca podrás olvidar. 

Curioso que empiece relatando en segunda persona del singular y es que, la novela se escribe en don niveles narrativos. En primera persona del singular, el autor habla desde el presente. Veinte años después de haber ocurrido el suceso. En segunda persona del singular, recoge hechos del pasado. Es el año 1995 y el crimen ocurre en el entorno de las huertas de Murcia. 

¿Quién es ese personaje que aparece en amarillo en la portada? Puede que represente al propio autor. Está en el lugar de los hechos pero no ve bien. No se puede comprender el acontecimiento con claridad cuando Nicolás, el autor de los hechos, es tu mejor amigo; puede que represente a Nicolás, al que en realidad, no conocemos a lo largo de la novela. Sí sabemos los roles que ejerció desde la perspectiva de los otros. Amigo, hermano, hijo pero no identificamos el por qué. Nicolás se escurre a lo largo de la novela.
 
¿Y qué tiene de original? Ocurren cada día miles de sucesos que podrían ser muy similares. Sin embargo, ¿cómo puede asumir una persona que su mejor amigo ha matado a su hermana? ¿cómo atreverse a publicar una novela que recoja este hecho real en la que el autor tiene un vínculo emocional y vital con las víctimas de esta tragedia? ¿qué sentimientos puede experimentar alguien que después de 20 años vuelve a indagar en un hecho que fue percibido con la neblina que irremediablemente se genera cuando los hechos trágicos repercuten directamente en tu interior? ¿cómo hacerle justicia literaria a todos los involucrados respetando su dolor? 

Diría que el autor lo consigue. Humano, demasiado humano.  

Lo escribe: PAZ HERNÁNDEZ PACHECO
pazhernandezpacheco@gmail.com 





lunes, 17 de enero de 2022

Lecturas de 2021 con "ranking estrellado"

Como empieza a ser un clásico, comparto mi ranking estrellado de lecturas de 2021. Este año he leído menos que el anterio; mucho trabajo y también, por voluntad propia. Primera vez que me tomo un descanso de literatura desde que empecé a interesarme en la lectura siendo adolescente. Relacionado con "La llamada de lo salvaje" de Jack London.
He repetido algunos, como "Meditaciones" de Marco Aurelio. Es libro de cabecera. Sigue teniendo 5 estrellas. Si tengo que elegir, me quedo con dos. "El corazón es un cazador solitario" de Carson McCullers y "Penúltimos días con Escohotado" de Colmenero. Tal vez, en este último, no soy objetiva, pero me da lo mismo.

Otros rankings de 2020, 2019, 2018 y 2017. Pinche en cada año, si le interesa.